Para comprar tiquets no había cola a principio de septiembre. Muchas estancias majestuosas, esculturas magníficas en mármol tallado, pinturas y tapices, estos últimos algo descuidados. Lástima que la capilla real estaba restaurándose.

El Palacio Real de Nápoles es una impresionante representación del poder monárquico y la riqueza de la historia de la ciudad. Al acercarte, la grandiosidad de su fachada te deja sin aliento, y al entrar, el interior es aún más deslumbrante. Cada sala está decorada con muebles opulentos, tapices elaborados y obras de arte que reflejan el esplendor de las dinastías que gobernaron Nápoles. El Salón del Trono, con su magnificencia, te transporta a una época de realeza y elegancia. Además, los jardines que rodean el palacio ofrecen un respiro tranquilo en medio del bullicio de la ciudad. Visitar el Palacio Real es como abrir una ventana al pasado, donde se puede apreciar el legado cultural e histórico que ha dado forma a Nápoles a lo largo de los siglos. Lo recomiendo muchísimo.

Interesante visita. Como casi todo en Nápoles está en reformas pero se puede visitar la primera planta con muebles, decoraciones y pinturas de distintas épocas . No te pierdas la visita al jardín. Por solo 2 euros. Tiene unas vistas espectaculares.

Un interesante palacio real, no muy grande, donde destacan sobretodo los apartamentos de los bordones. Se puede visitar fácilmente en 45min - 1h y tiene un precio de 11€ Muy interesante para descubrir parte de la historia napolitana

La visita del Palacio Real fue realmente sorprendente. El precio es irrisorio (6€) y merece muchísimo la pena. Se encuentra en la famosa Plaza del Plebiscito. La entrada principal es impresionante con su elegante escalera. En su interior alberga un teatro, una capilla y varios apartamentos reales. Está muy bien conservado y muy cuidado. Lo recomiendo mucho